NO A LA VIVISECCIÓN.

Con la vivisección: ni reducir, ni reemplazar, ni refinar. Abolir (Cortado y pegado de Afilando nuestras vidas).

A la práctica sádica, cruel, inoperante (agrega tú mismo los adjetivos negativos que desees) llamada vivisección no se la puede regular ni refinar ni cosa parecida, con ella directamente hemos de pasar a su abolición, su obsolescencia es más que clara a la hora de la verdad por decirlo de una manera. Todas las especies animales (tanto humanos como no humanos) vienen sufriendo sus llamados avances , desde las creaciones de virus, enfermedades generadas en laboratorios, medica-mientos y vacunas inservibles que se traducen en reacciones adversas que pueden deformar un feto, gripes animales varias, inducción de cánceres...Si todos los seres sufrientes del reino animal tuviéramos conocimiento de causa (y del efecto de la llamada ciencia sobre los animales), nos indignaríamos (aprovecho esta palabra tan manoseada últimamente) sobre ella; ante esto los defensores de su falsedad no tendrían sitio alguno donde refugiarse.

Aquí hablo de los propios vivisectores, empresarios que venden a los animales, los transportan, los "cuidan"(si a un carcelero se le puede decir así), a los "trabajadores" que de algo tienen que vivir y es usando a los animales, abriéndolos, machacando, despedazando, destripando, extirpando órganos e implantando artefactos artificiales. Los dueños de las empresas que van desde farmacéuticas, de limpieza, automotrices, armamentistas, tabacaleras, de bebidas alcohólicas, y también a quienes consumen estos productos avalados por el hecho de estar testeados-probados en animales antes de caer al consumidor final (cuando hablo de los consumidores me refiero a las personas que sabiendo lo que es la vivisección la justifican, así como un carnívoro justifica el hecho de comer cadáveres sabiendo que se puede alimentar de otra forma, eso no es más que el ejercicio de autoridad por el mero hecho de ser de la especie humana, especismo que le dicen).

Pasos largos nos quedan para lo que pretende el título, lo cual es abolir, extirpar de la sociedad a una de las lacras donde se reproduce el especismo. Para eso es necesario el comprender, leer, formarse a través de datos que son en gran medida contrainformativos con el poder, disidentes en cuanto al trato que se ejerce hacia las demás especies animales (el tratamiento a la nuestra no la debemos olvidar) es en términos únicamente productivos, donde lo económico prima por sobre el valor de la vida, como si de un objeto se tratase...
Concientizarnos es una de las tareas que tenemos como seres sensibles que somos, o al menos eso parece ser, hagamos que esto sea un paso para cortar cadenas de siglos de opresión a las demás especies. La vivisección es uno de los eslabones cotidianos a quebrar, tengámoslo en cuenta entonces en nuestras decisiones cotidianas a la hora de usar tal o cual producto, alternativas existen, es cuestión de buscarlas.

Que la liberación sea total, porque si no, será otra farsa más.

éste texto sirve cómo introducción del libro "Ni tres r´s, ni ostias: la vivisección es un fraude", que será editado en breves.