*A LAS ORGANIZACIONES SOCIALES.*
*A LOS COLECTIVOS AUTONOMOS Y AFINES.*
*A LA COMUNIDAD ESTUDIANTIL Y*
*AL PUEBLO EN GENERAL.*
La madrugada del
lunes 3 de marzo, un grupo de 30 individuos de la Normal Rural
“Tenería”, perteneciente a la FECSM y la autodenominada “Coordinación”
del Auditorio Che Guevara”, irrumpieron en el auditorio rompiendo
vidrios y puertas con la finalidad de tomar el espacio por la fuerza. En
el interior se encontraban 6 de nuestrxs compañerxs quienes fueron
golpeados, amordazados y torturados con choques eléctricos e
instrumentos de uso paramilitar, así como intimidados psicológicamente.
También nuestra felina compañera Lola y el compañero canino Pucky, que
fueron golpeados y sobrevivieron al ataque. Dicho grupo, además, robó el
fondo cooperativo del Comedor Popular Vegetariano.
A las 12 del medio día esta supuesta “coordinación” que tenia tomado
el auditorio, convocó una rueda de prensa con la finalidad de legitimar
su permanencia dentro del mismo, a través de la calumnia, inventando que
aquí se efectuaba el narcomenudeo. Posteriormente compañerxs afines y
estudiantes de la Universidad que reconocen el trabajo que se ha venido
realizando en este espacio, frente al ambiente de ignominia y después de
la confrontación verbal, decidimos solidariamente recuperar el
auditorio. Lxs compañerxs agredidxs se presentan y dan su testimonio
ante los medios de comunicación.
Al ver la afluencia de gente y el repudio hacia la usurpación del
espacio los agresores huyen por la puerta de la galería en dirección al
cubículo estudiantil de la Facultad de Contaduría , y otros tantos al
café de los hermanos Cerezo despojándose en el camino y a la vista de la
comunidad estudiantil de capuchas, guantes y sus armas. Es alcanzado
uno de los agresores y al tratar de zafarse se arma una trifulca.
Ya en el interior del auditorio donde se formó una asamblea
universitaria, el sujeto se identifica con el nombre de David Moreno
Palacios, quien es estudiante de la Normal Rural de Tenería. Se le
cuestiona sobre los hechos y su participación en los mismos: “fuimos
citados en la madrugada, en la explanada de la escuela…”; “se nos trajo a
la ciudad de México donde nos recibieron 10 personas quienes nos
entregaron un pasamontañas y un “palo” y se nos dijo que había unos
drogadictos en el espacio que les pertenecía”.
Aún antes de que dicha persona hiciera sus declaraciones y cuando
incluso el grupo agresor todavía se hallaba dentro del auditorio, ya el
Comité Cerezo denunciaba su inexistente secuestro y como parte de su
labor de supuesta “defensa de los derechos humanos” solicitaba la
intervención del Estado, intentando así ridículamente ocultar o esconder
su responsabilidad en los hechos.
No conformes con esto, la madrugada del 4 de marzo mientras se
realizaba la guardia, fuimos hostigadxs nuevamente. A la altura del
parabús de Psicología arribaron 3 camiones con normalistas rurales, así
como 5 autos particulares. Unas 200 personas comenzaron a gritar
consignas y a aventar petardos hacia el auditorio. Despues se marcharon.
No es la primera vez que el espacio ha sido difamado y atacado por el
Estado y sus lacayos, con argumentos que casualmente son los mismos.
Ante estas agresiones siempre hemos respondido con trabajo honesto,
horizontal y autónomo. Cuando hablamos de autonomía no nos referimos a
ese espejismo que propaga la Universidad, sino a la capacidad de cada
individuo para autodeterminarse, sin la necesidad de ninguna autoridad
que rija su actuar.
Por ello reivindicamos al auditorio Che Guevara como un espacio donde
ningún tipo de autoridad, llámese partido político, Rectoría o
Dirección de la Facultad de Filosofía y Letras tiene cabida, puesto que
aquí el trabajo se construye por cada individuo acorde a sus capacidades
y compromiso.
Rechazamos la intromisión del Estado y las organizaciones que lo respaldan.
Así como no aceptamos ninguna injerencia sobre nuestro actuar,
tampoco lo hacemos sobre la gestión económica, es decir, no aceptamos ni
lo haremos el subsidio que venga de algún partido político o la
Rectoría de la Universidad, ni recibimos subsidios internacionales ,
publicos o privados.
Con nuestras actividades como el comedor vegetariano, los talleres,
el café y el trabajo artesanal es como autogestionamos las necesidades
del espacio.
La autonomía y la autogestión son principios que guían nuestro
trabajo, el cual es horizontal puesto que todxs aportan ideas y
construimos proyectos colectivos, siempre con base en el apoyo mutuo, la
solidaridad, la participación y los acuerdos. Somos individuxs afines
que luchamos por aquello en lo que creemos y no por lo que alguna
dirigencia imponga. No tenemos líderes pues no los necesitamos. Estos
son los principios que mueven el trabajo dentro del auditorio y nos
oponemos a todos aquellos colectivos o individuos que quieran atentar
contra estos.
Alzar el puño contra el tirano es un acto de violencia liberadora. En
cambio el sometimiento y la tortura son expresiones viles de la
podredumbre del sistema. La práctica de truncar la libertad de una
persona, someterla y torturarla es contraria a la expresión de
autodefensa que ejerce una colectividad en la lucha por su libertad. No
se equipara el hecho de torturar para defender una posición de poder,
con la acción de valerse de los recursos que se tienen a mano para
recuperar un espacio autónomo que no se cobija en la legalidad del
Estado.
Es por esto que consideramos la tortura que se ejerció contra
nuestrxs compañerxs como una práctica que refleja el carácter enfermizo y
pútrido del sistema y de sus expresiones incrustadas en el descontento
social. Dentro de esta enfermedad es necesario hacer notar un síntoma:
los supuestos defensores de los Derechos Humanos y luchadores sociales,
que no hacen más que avalar al Estado, son ahora los que juegan el papel
de mercenarios. Tal es el caso del Comité Cerezo, la Brigada
Multidisciplinaria, y el FNLS, quienes sedientos de poder han
reproducido las practicas del Estado, en forma de paramilitarismo y
acciones porriles, y convirtiéndose en lo que tanto combaten en un falso
discurso. Caso especial es el de la FECSM, donde quienes la controlan
jerárquicamente llegan como en este caso a utilizar a los estudiantes
como carne de cañón, forzándolos por medio de la disciplina.
Lxs agresorxs intelectuales y materiales tienen nombre y apellidos:
Francisco, Antonio, Héctor, y Alejandro Cerezo Contreras; Manuel y César
Pérez Cruz, Mayra Valenzuela. Para nosotrxs es obvio que por sus
propias acciones estas personas no tienen que volver a pisar el
Auditorio.
Otra práctica que evidencia el caracter afin al sistema de este
grupo, es el valerse de la cobertura que le ofrecen los medios masivos y
desde ahí atizar la campaña de linchamiento en nuestra contra.
Contrario a ello, nosotrxs no buscamos sino la comunicación y el
acompañamiento directo de quienes no tienen el acceso a dichos
instrumentos. Es a partir de la solidaridad y el apoyo mutuo que creamos
nuestros propios medios y lazos.
Reafirmamos la necesidad de la construcción, mediante el trabajo y la
responsabilidad, de espacios colectivos, autónomos y autogestivos así
como su defensa a través de proyectos y actividades. Con el trabajo que
se realiza cada día es como se construyen los espacios. Porque un
espacio libre no se “administra”, se trabaja de una forma colectiva y
horizontal.
“LA TORTURA ES UNA PRACTICA DEL ESTADO”
“FUERA PORROS Y PARAMILITARES DE LOS ESPACIOS AUTONOMOS”
*Grupos, colectivos e individuos por espacios autónomos y autogestivos.*
*Auditorio Che Guevara Liberado, 7 de Marzo de 2014.*
*Se pide el apoyo de organizaciones y personas afines y solidarias
con víveres, difusión de este comunicado, así como pronunciamientos y
muestras de apoyo.*
–
*NOTICIAS ANTI CARCELARIAS*
http://www.abajolosmuros.org/
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¡Presos anarquistas a la calle!
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